Conservar una embarcación en condiciones óptimas requiere de tiempo. En Toyo Aventura te explicamos los cuidados que debes tener antes y después de utilizar tu kayak. De esta forma, durará más tiempo y navegarás seguro cada vez que vayas en tu navío.
Tabla de contenidos
Importancia de cuidar tu kayak
Ya sea en el río o estando en el mar, se pueden presentar situaciones incómodas en las que es conveniente que tu embarcación se encuentre en perfectas condiciones. Esto solo se logra invirtiendo tiempo en el mantenimiento de tu kayak. De igual manera, es necesario que evites el desgaste y el uso inapropiado de tu navío.
Por otra parte, conservar la embarcación te brindará seguridad si realizas Kayak en Cabo de Gata o en otra localidad. Ya que además de cuidarlo para soportar condiciones adversas de la naturaleza, también te cercioras de que la adquisición del kayak sea una inversión a largo plazo. Ya que extiendes su vida útil. Para ello, debes darle más importancia que un simple dispositivo de entretenimiento.
Cuidados que debes tener antes y después de utilizar el kayak
El mantenimiento del kayak incluye más que la estructura de la embarcación. Para conservarlo, también es necesario cuidar del resto del equipo (remos, chaleco, faldón, chaqueta, traje de agua, botines y la unidad de acampar, si la posee). Aunque estos elementos son más fáciles de lavar y almacenar, también requieren tiempo.
Para brindarle el tratamiento necesario a tu kayak, debes guiarte por su material de fabricación. Los de madera requieren un cuidado más intenso. Como los más comunes son los de fibra de vidrio y los de plástico, nos enfocaremos en el cuidado de estos navíos.
Antes de navegar en kayak
Los cuidados previos a navegar te garantizan una salida segura. El cambio de una pequeña pieza puede ser la diferencia entre el quiebre de tu nave y su seguridad. Asimismo, preservar su aspecto cuenta para mantenerlo lo mejor posible y por mucho tiempo.
Inspección de rutina
Antes de salir de paseo es necesario que realices una inspección de rutina. Añádela como norma básica de seguridad. Con esto te cercioraras que todo marcha bien con la canoa y que tendrá un máximo rendimiento estando en el agua. Es necesario que supervises las condiciones de los siguientes elementos y, en caso de que lo amerite, sustituirlos por unos nuevos.
- Es importante verificar que estos objetos estén en las mejores condiciones. Si existe alguno oxidado, aislado o doblado, no dudes en cambiarlo.
- Las cintas o correas de amarre deben estar enteras, sin cortaduras, huecos o desgastadas en exceso. Recuerda que estás sirven para mantener segura la nave mientras se traslada en coche y durante el almacenamiento.
- Sustituye las hebillas que estén corroídas o dobladas. Tener estas piezas en buenas condiciones asegura el agarre y tu kayak.
- Si vas de pesca es necesario que verifiques los cordones de seguridad que mantendrán tus utensilios unidos al bote. También revisa que el cordón de fondeo se encuentre en buenas condiciones. Selecciona uno grueso y de material anticorrosivo para mayor durabilidad. En las tiendas marinas encontrarás el adecuado.
- Cerciórate que los diferentes sellos que impiden el paso del agua tanto al kayak como a los diferentes compartimientos estén inmejorables. De lo contrario, busca sellador para tapar lo necesario. Recuerda evitar el uso de silicona.
Protección UV
Para que tu kayak tenga máxima durabilidad, debes cuidarlo de los rayos ultravioleta, en especial si es de plástico el bote. Este material es más fácil de cuidar y por lo general, el tipo que se emplea en estas canoas es de buena calidad. Adicionalmente, incluyen la protección UV en el tinte que les da color. Aun contando con este beneficio, conviene proporcionarles otra garantía.
Para evitar que se vuelan quebradizos y se decoloren, puedes aplicar un protector de plásticos con filtro UV por lo menos dos veces al año. Además de servir como bloqueador solar, humectan el material de fabricación y restituyen los aceites en su estructura. Esto beneficia la flexibilidad y apariencia del navío.
Este tipo de sustancias también se pueden utilizar en los equipos de navegación hechos de nailon. Por otra parte, aunque la fibra de vidrio no es tan sensible al contacto con el sol, es necesario aplicar protector a zonas como los asientos, hebillas, manillas y demás que pudiera afectarse.
Después del paseo en kayak
Esta parte es la que requiere mayor tiempo. El mantenimiento incluye desde el lavado, hasta el almacenamiento del kayak. Todos los pasos, bien realizados, contribuyen a la preservación de tu canoa y el equipo de navegación. Recuerda que debes atender tanto a la nave como todos utensilios. En especial si el paseo fue en el mar.
Lavado del equipo
Al regresar del paseo, principalmente si fue en el océano, se recomienda enjuagar el kayak con agua dulce, al igual que el resto de las herramientas. Esto evitará que agentes corrosivos dañen el material de tu equipo en general. Haz énfasis en la limpieza de las piezas metálicas como tornillos, hebillas y engranajes, incluso si son de acero inoxidable.
También asegúrate de asear la embarcación en la parte interior. La arena puede ser un problema en piezas como el timón y los rieles de los pedales. De adherirse a alguna de estas áreas podría trabar el mecanismo y producir abrasión. Además, lava los sellos de goma, ya que son sensibles al salitre.
Deja secar en un lugar con ventilación. De ser necesario, utiliza una toalla para secar en el interior. Si tu kayak está fabricado en fibra, te sugerimos emplear algún pulimento luego de lavar con agua dulce. Antes de aplicar, verifica que sirva para el material en específico, tomando en cuenta que hay fibra de vidrio, carbono y PVC.
Cuidado anticorrosivo
Las zonas donde hay metales son particularmente delicadas y más cuando se encuentran dos diferentes. Debido a que se podría generar una corrosión galvánica. Para evitar estas situaciones molestas, te sugerimos aplicar un lubricante que repela el agua, justo después de secar.
De igual manera es conveniente que engrases los sistemas de manijas, timón y pedales.
Almacenamiento preventivo
Debes poner atención al lugar donde guardas tu kayak. Evita que esté en contacto constante o choque con otros objetos. Es usual que por el inadecuado almacenamiento la canoa reciba golpes que además de dañar su superficie, pueden afectar su estructura y utilidad. Puedes colocar los pernos especiales para guindar la embarcación en la pared.
Para asegurarlo utiliza las correas de amarre. Esto es útil especialmente con los materiales más livianos como el plástico. Si puedes disponer de un espacio único para el kayak y el equipo de navegación, sería lo ideal. En cambio, si no puedes almacenarlo dentro de tu vivienda puedes dejarlo fuera pero nunca sin protección.
Consigue una lona resistente en las medidas adecuadas de tu navío. Te recomendamos que la adquieras, aun cuando puedas almacenarla en el interior de tu hogar. Así evitarás que animales ingresen en el interior, y lo mantendrás libre de polvo. Además, si vas a guardarlos por largos periodos, se aconseja hacerlo en vertical. En especial los de plástico.
Recuerda que los cuidados del kayak inician desde el momento en que lo adquieres. Es importante que prepares tu rutina de lavado para después del uso, así evitarás olvidar pasos. Además, es beneficioso realizar cambios generales de las piezas, aplicar protector o pintar toda la embarcación una vez al año si nunca los has hecho por inconvenientes.
Consejos generales al navegar
Excluyendo los cuidados previos y posteriores al uso del kayak, ten en cuenta que también debes cuidar de tu canoa mientras estás en el agua. Estos consejos no sólo te ayudarán a conservar la integridad de tu embarcación, también te mantendrán a salvo, siempre y cuando no te encuentres en situaciones extremas.
- Evita las rocas. Navega por una zona libre de obstáculos como piedras o arrecifes, ya sea en el mar o el río.
- Define el uso. Si tu actividad es la pesca deportiva no es conveniente un kayak de plástico que debe estar expuesto varias horas en el mismo punto. Elige el ideal para cada actividad.
- Evade las sustancias corrosivas. Durante tu viaje, no lleves contigo aceites que puedan corroer el material de la canoa, a menos que sea estrictamente necesario. También evita llevar bebidas que puedan dañar la superficie.
- Huye del mal tiempo. Si el clima no se ve favorecedor, lo mejor es no salir a navegar. Podrías quedarte atrapado en una tormenta, terminar herido o perder tu embarcación.
- Verifica el anclaje. Si anclarás tu bote para pescar, particularmente en zonas de fuertes corrientes, verifica que todos los amarres y el ancla queden asegurados. De esta manera evitarás volcarte o ser arrastrado por el oleaje sin darte cuenta.
- Traslada con cuidado. Asegura todos los amarres en el coche antes de movilizar tu canoa. Así evitarás que caiga al trasladarla o mientras la bajes del auto.
Estos son los cuidados que debes tener antes y después de utilizar tu kayak. Si no tienes uno pero deseas entretenerte realizando esta disciplina deportiva. No lo pienses más y contáctanos. Somos especialistas en actividades recreativas en Almería.